Cuatro palestinos y un israelí muertos en nuevo brote de violencia
Un israelí murió por un cohete disparado desde Gaza contra Israel, donde el sábado cayeron unos 250 cohetes, lo que constituye un récord para ese tipo de ataques en un sólo día. El saldo de este nuevo brote de violencia incluye cuatro palestinos muertos.
Primera modificación:
Moshe Agadi, un israelí de 58 años, murió la madrugada del domingo en Ashkelon cuando un cohete disparado desde el cercano enclave palestino impactó contra su casa, según medios israelíes. Sucumbió a sus heridas en el hospital, precisó la policía.
Desde la mañana del sábado, militantes palestinos dispararon unos 250 cohetes hacia localidades del sur y del centro de Israel. Varias decenas fueron interceptados por la defensa antimisiles, indicaron las Fuerzas Armadas israelíes. Una gran parte de los cohetes impactaron en zonas que no están habitadas, dijo la policía.
Una israelí de 80 años resultó gravemente heridas por esquirlas de un cohete en Kyriat Gat, a 20 km de Gaza, y un israelí de 50 años resultó herido en Ashkelon, según la policía.
Por las decenas de ataques que lanzó Israel, cuatro palestinos murieron y 40 resultaron heridos, según el ministerio de Salud de Gaza, enclave controlado por Hamas.
Una beba de 14 meses y su madre, embarazada, murieron en un ataque que alcanzó su casa en Gaza, según esta fuente y allegados de las víctimas. Una hermana de la beba resultó gravemente herida.
"Estábamos almorzando cuando la casa fue bombardeada por un avión israelí. Saba (la beba) murió de inmediato", dijo a AFP Abu Mohamed Abu Arar, un allegado. "Falastin Abu Arar, de 37 años, embarazada, falleció por las heridas que recibió en la cabeza", según el ministerio.
El ejército israelí refutó esta versión. Un portavoz militar, Avichay Adraee, sugirió en Twitter en árabe que la muerte de la madre y su bebé tal vez eran producto de un disparo palestino, sin proporcionar más detalles.
Al caer la tarde seguían sonando las sirenas en las zonas israelíes limítrofes con la Franja de Gaza, según los militares. La policía pidió a los habitantes que se dirigieran a los refugios en cada alerta.
Yihad Islámica reivindicó haber disparado una parte de esos cohetes y dijo que continuaría.
En un video difundido por las redes sociales, el brazo armado del grupo amenazó con atacar varios objetivos estratégicos israelíes, como el aeropuerto internacional Ben Gurion, cerca de Tel Aviv.
La Fuerza Aérea apuntó contra unas 120 posiciones de Hamas y su aliado, Yihad Islámica, según fuentes militares, entre ellas numerosas bases y un túnel de Yihad Islámica destinado a perpetrar ataques en territorio israelí.
Las Fuerzas Armadas israelíes también destruyeron dos edificios de varios pisos en la ciudad de Gaza, según residentes. El ejército indicó que uno de ellos alojaba a los servicios de inteligencia militar y los servicios de seguridad de Hamas.
Habitantes del barrio afirmaron por su parte que el edificio de varios pisos albergaba la oficina de la agencia de prensa estatal turca Anadolu, una información confirmada por Turquía que condenó "con firmeza" el ataque denunciando una "agresividad sin límites".
Según Anadolu el personal de la agencia evacuó el edificio poco antes del ataque que estuvo precedido por un aviso.
En este contexto Israel anunció el cierre de los pasos fronterizos de Gaza y la veda a la pesca en el litoral del enclave.
Según una fuente de Yihad Islámica, Egipto, que oficia como intermediario entre Hamas e Israel, intenta una mediación para rebajar la tensión.
En Bruselas, la Unión Europea pidió el "cese inmediato" de los disparos.
El emisario de la ONU encargado del conflicto israelo-palestino, Nickolay Mladenov, instó a "todas las partes a calmar la situación y a regresar al entendimiento de los últimos meses".
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