Saltar al contenido principal
Turquía / Migrantes

Turquía, ¿solución a la crisis de los migrantes ?

Tras la cumbre de africanos y europeos en Malta, 24 países de la Unión se reunieron para discutir el problema de la llegada masiva a Europa de refugiados, centrando en gran parte sus discusiones en torno al papel de Turquía en la resolución del asunto.

La canciller alemana Angela Merkel y el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, durante la cumbre de Malta, 12 de noviembre de 2015.
La canciller alemana Angela Merkel y el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, durante la cumbre de Malta, 12 de noviembre de 2015. REUTERS/Yves Herman
Anuncios

Mientras los dirigentes de la Unión Europea buscaban soluciones a la situación, algunos miembros de la Unión decidían tomar medidas drásticas, unilateralmente, en sus fronteras.

De allí que el tema del control de las fronteras en territorio de la Unión suscitara la ardiente defensa de Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, del tratado de Schengen, que establece la libre circulación entre los estados europeos. Para Tusk el tratado protege a Europa de convertirse en una «fortaleza».

¿Límites a Schengen?

En la práctica, varios estados europeos han vuelto a recurrir a los controles de fronteras, en vista de que la UE no ha llegado a un acuerdo sobre las cuotas de refugiados por país, en especial sirios. Por otra parte, han rebasado sus capacidades para acoger correctamente a los migrantes.

El gobierno austríaco anunció la construcción de una valla de rejas simples de 3,7 km en su frontera con Eslovenia para reforzar el control del paso de los migrantes.
El objetivo es marcar «claramente» la frontera y no cerrarla, según el ministro socialdemócrata Josef Ostermayer . La ministra del interior, Johanna Mikl-Leitner, informó que la UE estaba al tanto de esta decisión, una medida sin precedente entre dos países de la zona Schengen.

En cuanto a Alemania, va a prolongar sus controles en las fronteras hasta mediados de febrero, tal como indicó el ministerio del interior.

De ahora en adelante, Berlín va a implementar procedimientos excepcionales que permitan la suspensión temporal de las reglas de libre circulación durante un período que puede llegar a dos años.

Turquía, un freno a los refugiados

Ante la magnitud que ha adquirido el fenómeno de la llegada masiva de migrantes a territorio europeo, los dirigentes de la Unión Europea anunciaron la realización, lo más pronto posible, de una cumbre en Turquía para que Ankara acepte represar en su territorio a los refugiados. El encuentro podría realizarse a finales de noviembre o principios de diciembre.

Jean Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, reconoce que ello implica problemas de financiamiento para ayudar a Turquía en el cumplimiento de esta misión. La Comisión desea asignar tres millardos a esta tarea en dos años y debería aportar 500 millones de euros; pidió a los 28 estados miembros de la Unión que completen la suma prevista. Sin embargo, el presidente francés François Hollande reconoció al término de la cumbre de Malta que las cifras asignadas al financiamiento todavía no se habían decidido.

Aun cuando la Unión Europea pida a Turquía - que ya ha acogido 2,2 millones de refugiados sirios - que frene la partida de los migrantes hacia Europa, el gobierno de Recep Tayyip Erdogan estima que las bases de tal acuerdo no están lo suficientemente definidas.

Este tema será abordado al margen de la próxima cumbre del G20 en Antalia, Turquía, dentro de tres días.

Migrantes africanos: «tratamiento diferenciado»

Los europeos propusieron en Malta una ayuda de 1,8 millardos de euros a los dirigentes africanos en contrapartida de esfuerzos tendientes a represar la salida de migrantes irregulares hacia Europa.

En este caso, una vez más, la UE solicita a sus estados miembros una contribución financiera. No obstante, de momento solo se cuenta con promesas que ascienden a 78 millones de euros.

Además de la «insuficiencia» de esos fondos, criticada por el presidente de Níger, Mahamadou Issoufou, algunos de los jefes de estado africanos presentes en la cumbre de Malta expresaron su descontento por la insistencia europea en expulsar a los migrantes africanos y enviarlos hacia sus respectivos países.

El presidente senegalés, Macky Sall, ve en la propuesta europea una discriminación en relación a migrantes de otro origen : «No se puede insistir en enviar a los africanos a sus países, mientras que se habla de acoger a los sirios y a otros. Es un tratamiento diferenciado que condenamos porque es discriminatorio ».

Pese a ello se adoptó un plan común que favorezca la llegada a Europa de delegados africanos de inmigración para determinar la nacionalidad de los migrantes irregulares. A partir del año próximo se iniciaría el programa con diez países africanos. Paralelamente, se reforzaría la inmigración legal hacia Europa. Los gobiernos insistieron en esta opción, en vista de la importancia de las sumas de dinero que envían los expatriados a sus hogares.

De momento, los europeos no han ido más allá de un tímido aumento de las becas a estudiantes e investigadores africanos. También proponen lanzar «proyectos piloto» de inmigración legal en algunos estados seleccionados.

 

 

 

 

 

Boletín de noticiasNoticias internacionales esenciales todas las mañanas

Siga toda la actualidad internacional descargando la aplicación RFI

Compartir :
Página no encontrada

El contenido que solicitó no existe o ya no está disponible.