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Kenya / Barack Obama

Kenya se prepara a recibir a Barack Obama

El presidente estadounidense llega la noche del viernes a la patria de sus antepasados paternos, en medio de importantes medidas de seguridad, en un país afectado por atentados terroristas cometidos por los shebabs, islamistas somalíes afiliados a Al Qaeda.

Wycliff Madegwa imprime el rostro de Obama en camisetas nuevas en el barrio popular de Kibera, Nairobi, 23 de luio de 2015.
Wycliff Madegwa imprime el rostro de Obama en camisetas nuevas en el barrio popular de Kibera, Nairobi, 23 de luio de 2015. REUTERS/Noor Khamis
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Barack Obama despegó de Estados Unidos a las 0H28 GMT a bordo del Force One para visitar por primera vez, desde que asumió la presidencia, el país de su padre.

Más allá del lado afectivo, el viaje tiene otras connotaciones acordes con la realidad actual. En primer lugar, Obama pronunciará un discurso en una cumbre internacional de industriales e inversionistas. El tema económico ocupará una posición clave en sus conversaciones con el presidente de Kenya, Uhuru Kenyatta, pero ambos mandatarios hablarán también de seguridad y del respeto a los derechos humanos. Aunque Kenyatta minimizó la importancia de este último asunto.

Una semana antes de emprender su viaje, Obama resaltó las posibilidades económicas del continente africano: “Pese a sus numerosos desafíos, Africa es un lugar increíblemente dinámico, uno de los mercados que crece con más rapidez en el mundo … Las oportunidades son extraordinarias y debemos romper con los clichés y las barreras”.

Una parte de Nairobi permanecerá completamente bloqueada durante la estadía del presidente norteamericano, que concluirá el próximo domingo con su partida en dirección de Etiopía y la sede de la Unión Africana.

Benson Kibue, comandante de la policía de Nairobi, declaró que se desplegarán 10.000 efectivos en la ciudad, lo que representa un cuarto de las fuerzas policiales del país. El objetivo fundamental es la protección contra eventuales incursiones de los shebabs, que ya cometieron un atentado de gran envergadura en la capital, con la matanza del centro comercial Westgate en 2013, que dejó el terrible balance de 67 muertos.

Preparativos en la capital

Todo el mundo espera mucho de esta visita porque en general existe la certeza de que Estados Unidos apoyará al país para convertirlo en una especie de centro del continente.

El presidente Uhuru Kenyatta afirmó que se ha esperado “con impaciencia este día” y que su país reserva a Obama un recibimiento grandioso. En cuanto al gobernador de la provincia de la capital, Evans Kidero, ha estimado que la presencia del presidente de Estados Unidos equivale a un voto de confianza a la ciudad y al país.

Desde hace varias semanas, Kidero lanzó un amplio programa de mejoras y reparaciones en la capital, que ha incluido la reparación de los huecos en las vías de circulación de vehículos, limpieza de las calles, renovación de la señalización y construcción de nuevas aceras.

Desde luego existe una gran expectativa entre los kenyanos frente a esta visita presidencial, aunque se sentían un tanto frustrados por la tardanza de la misma. Como quiera que sea, Obama es un héroe en la tierra de Kenya.

Dicho sea de paso, el retardo del viaje de Obama se debe a la acusación del presidente Kenyatta por la Corte Penal Internacional de presunto responsable de las violencias post-electorales entre 2007 y 2008. Los cargos fueron abandonados en diciembre de 2014 a causa de la obstrucción del gobierno de Kenya, según la procuradora de la CPI. De esta manera, quedaron eliminados los últimos obstáculos a la visita de Obama.


La seguridad, tema primordial en las conversaciones

El presidente Kenyatta declaró que el “combate contra el terrorismo será el tema central” en su encuentro con Obama. El jefe del estado indicó que trabajaba en este terreno en estrecha colaboración con Estados Unidos. No hay que perder de vista que Kenya fue el blanco de un sangriento ataque de Al Qaeda contra la embajada norteamericana en 1998, que ocasionó 224 muertos.

La presencia de Barack Obama en Kenya podría ser una gran tentación para las milicias islamistas shebabs: “un atentado, o incluso una tentativa, permitiría a los shebabs de tener un rol protagónico”, advirtió Richard Tuta, experto en seguridad que trabaja en Nairobi.

El presidente resaltó también la importancia de otros asuntos para el país, sin perder de vista la seguridad: “La pobreza, la mejora de la salud de nuestros habitantes, una mejor educación, mejores carreteras, más seguridad: estas son nuestras prioridades”, enfatizó el mandatario.

Centenas de agentes secretos estadounidenses llegaron a Kenya desde hace varias semanas por razones evidentes. Para algunos analistas de los asuntos de seguridad en la región el dispositivo de agentes “es sofocante”, como afirmó el especialista Abdullahi Halakhe.

 

 

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